Hipatia de Alejandría
Hipatia de Alejandría fue sin dudas una mujer adelantada a su tiempo, tanto por su pensamiento, como por sus contribuciones a la ciencia, así como sus actitudes e influencia sobre su entorno.
No nos han llegado muchas de sus obras, de las que sólo conocemos su existencia por los comentarios que de ellas hacen otros autores, pero sí sabemos que cultivó con éxito diferentes campos como la lógica, la filosofía, las matemáticas, la música y la astronomía.
Hipatia tuvo la suerte de nacer (algunos historiadores dicen que en el 350d.C, otros que en el 355 d.C, e incluso en el 370 d.C; en Alejandría) en un entorno preocupado por el conocimiento, fue hija de Teón de Alejandría, un filósofo y matemático de gran reputación (fue director del Museo de Alejandría, cargo que posteriormente regentaría la propia Hipatia; aunque no hay que considerar el museo de esta época un edificio como los actuales, pues en ellos se daban cita profesores que disertaban sobre diferentes temas).
Teón se preocupó de que su hija pudiese acceder a los más variados conocimientos, en su afán por hacer de ella una persona perfecta.
Viajó también por Italia y Grecia, adquiriendo diversos conocimientos filosóficos, conocimientos que no dudaba en enseñar a toda persona que lo solicitaba.
Su influencia fue enorme en la política, destacando su oratoria y la trascendencia de sus ideas y pensamiento.
De su obra destaca el comentario sobre la obra aritmética de Diofanto (considerado padre de la aritmética) que hizo en 13 volúmenes, el tratado sobre la geometría de las cónicas de Apolonio y la revisión que hizo junto a su padre de los “Elementos de la Geometría” de Euclides, que en la actualidad se sigue usando como referencia.
También es considerada la creadora de diversos elementos como el aerómetro, el astrolabio plano o el hidroscopio.
Pero Hipatia no vivió en la mejor época para ser científica, pues en esos momentos el cristianismo se radicaliza y Alejandría vive unos momentos convulsos, experimentando incluso cierto retraso en el pensamiento y las teorías científicas a causa de la radicalización del cristianismo y las acusaciones de paganismo que se vertían incontroladamente.
Hipatia fue advertida de este hecho por su círculo más cercano, la encomendaban a que “abrazase” el cristianismo para evitar problemas futuros, pues su posición privilegiada y su pensamiento levantaba no solo sospechas entre los cristianos, sino una profunda envidia y odio.
Se le acusó por tanto de paganismo, pero Hipatia se mantuvo fiel a su pensamiento y forma de actuar, aún a sabiendas de que esto le podía traer nefastas consecuencias; como así fue a principios del 415, cuando regresando a su casa fue asaltada por unos exaltados que le golpearon, condujeron a una iglesia donde le desnudaron e hicieron cortes con conchas y caracoles hasta que murió, para después ser desmembrada y “paseada” por la ciudad de camino a un lugar llamado “Cinareo”, donde la incineraron.