Otras cuestiones para tener en cuenta en la redacción
Ya hemos hecho alusión a puntos que debemos tener en cuenta para que nuestro texto resulte lo más claro posible.
A continuación daremos a conocer otros puntos que se deben tener en cuenta y que también tienen relación con la redacción a la que nos enfrentaremos:
Los nombres propios de las instituciones deben escribirse en mayúscula.
Por ejemplo: Ayuntamiento de Cádiz.
Lo mismo ocurre cuando no usamos el nombre completo pero nos referimos a la misma entidad en concreto. Por ejemplo, el Ayuntamiento (ese en concreto).
Cuando hablemos de instituciones sin referirnos a una en concreto, no es necesario colocarlas en mayúscula. Así, el caso de “los ayuntamientos”, “los ministerios”. Esto es así ya que no se trata de nombres concretos.
Los cargos que tienen las personas que representan a las instituciones se escriben en minúscula. Solo es necesario poner en mayúscula el nombre de la institución.
Por ejemplo: el presidente (cargo) del Gobierno (entidad).
Los números en prensa suelen escribirse de forma literal (usando las letras) únicamente en las cantidades compuestas de una única cifra (del cero al nueve ambos inclusive).
Las cantidades que consten de dos números se prefieren escritas de forma numérica (12, 24, etc.). Sin embargo, la forma de escribir en prensa cantidades altas redondas puede ser mixta (entre lo literal y lo numérico).
Así, los seis ceros de los millones se expresan de forma literal (no numérica con la palabra “millón” o “millones”) y la cantidad que acompañen se adaptarán a las reglas mencionadas anteriormente: se escriben en letras las cantidades de una cifra y en números las de más de una.
Por ejemplo:
Pero ésto no siempre ocurre así, ya que nos podemos encontrar cantidades con múltiplos no exactos. En estos casos, se escribe la cantidad con todas sus cifras de forma numérica. Por ejemplo: 9.862.492 pesos.
En los casos en que la exactitud no sea muy necesaria, se tienden a redondear (por ejemplo: “alrededor de 9,8 millones”) las cantidades, aunque ésto depende del criterio de quien escribe.
Quizás para medios más inmediatos como la radio y la televisión sea más fácil de captar la cantidad cuando se redondea, pero aquí consideramos que la ventaja del papel escrito es precisamente la posibilidad de ofrecer los datos con total exactitud, ya que la persona tiene la posibilidad de ver la cifra escrita sin mayores problemas.
Las cifras romanas (I;II,III;IV;V; etc.) se reservan para figuras cuyo nombre las inserte como las de los papas o reyes. Por ejemplo, Fernando VII.