El enmasillado
Una vez que hemos terminado el pesado proceso de pegar todas las piezas (sin que se nos pierda ninguna, sin poner excesiva cantidad de pegamento, etc), pasamos al también pesado proceso de enmasillado.
Por buena que sea la maqueta siempre encontraremos que hay partes que encajan no demasiado bien, que se forman pequeños huecos y, sobre todo, en las uniones sobresale un poco de pegamento seco y las dos partes pegadas quedan a distinta altura.
Todo esto, aunque parezca mentira, tiene solución. Para esto tenemos la masilla. Introducimos esta en los huecos y los rellenamos: ya está.
La masilla que uso es el Putty de Tamiya. Lo primero que hemos de hacer es revisar todo el aparato y ver donde están los posibles puntos conflictivos. Hay que tener cuidado, fundamentalmente con lo que esté más a la vista: la unión de las dos mitades del avión y la de las alas con el fuselaje.
Tomamos cinta de enmascarar. Cortamos pequeños trozos y los vamos pegando (con mucho cuidado) justo al lado de lo que queramos rellenar (es un trabajo pesado, ya os digo).
En la fotografía siguiente puede verse como he dejado al aire sólo la línea en la que el ala se une al fuselaje, tapando todo lo demás. Cuidado: la masilla puede disolver el plástico.
Dejamos que seque durante un rato.