Publicidad comparativa: Don Simón contra Granini
La publicidad comparativa bien utilizada es una herramienta poderosa.
En España es legal la publicidad comparativa. En este tipo de publicidad se menciona expresamente la marca competidora. Según nuestra legislación se puede citar al competidor, siempre que lo que se dice de la otra marca sea demostrable.
Una forma de colocarnos rápidamente en la mente del consumidor es compararnos con una marca líder o bien valorada.
La publicidad comparativa suele ser interesante cuando:
A) Nuestro producto tiene una ventaja que el mercado no está valorando. Tenemos un producto superior.
B) Una empresa pequeña o mediana desea sobresalir. También cuando deseamos retar al líder.
Además al compararnos con un competidor importante, las opiniones se polarizan. Al enfrentarnos a otra empresa importante, atraemos la atención. Normalmente al atraer la atención pública a los dos contendientes, en realidad se ven perjudicadas las ventas de empresas más pequeñas.
Normalmente a la empresa atacada no le interesa responder. Y si responde, se crea una polémica que puede ser beneficiosa.