Publicidad emocional
En la actualidad una gran parte de la publicidad no utiliza para vender argumentos racionales, no trata de convencer mediante la lógica, las funciones o utilidades del producto.
Si observamos muchos de los anuncios de la televisión tratan de vender utilizando los sentimientos y las emociones.
En mercados muy competitivos, donde los productos de las distintas marcas en realidad son muy parecidos, una buena opción es utilizar los sentimientos. Apelar a las emociones y relacionarlas bien con el producto suele ser una buena estrategia de marketing.