Detectando la enfermedad por el olor
Se sabe que perros entrenados pueden detectar el cáncer en humanos aunque con un alto porcentaje de error. Ahora un estudio de Mats Olsson del instituto Karolinska de Suecia sugiere que los humanos tenemos una capacidad similar y podríamos detectar si otra persona esta enferma por su olor.
Ser capaz de detectar este olor representaría una adaptación crítica que nos permitiría evitar enfermedades potencialmente peligrosas. Olsson se preguntó si esta adaptación podría existir en una etapa temprana de la enfermedad.
Para probar esta hipótesis Olsson y su equipo tomó ocho personas sanas y a unos las inyecto con una toxina, que es conocida por hacer que nuestro sistema inmunitario reaccione con rapidez, y a otros con una solución salina. Los participantes llevaban puesto una camiseta para absorber el sudor durante las siguientes 4 horas.
Los sujetos que fueron inyectados con la toxina produjeron una notable respuesta inmunitaria como por ejemplo la elevación de la temperatura del cuerpo y el aumento de niveles de un grupo de moléculas del sistema inmunitario.
Otro grupo separado de 40 personas olieron las camisetas. En general identificaron las camisetas de los sujetos inyectados con la toxina como que tenían un olor más fuerte y desagradable además de menos sano.
El componente químico que marca la diferencia esta todavía por ser identificado pero existe una correlación entre la intensidad de la respuesta inmunitaria y el olor corporal.
Visto en Science Daily