¿Sabías que consumir germinados nos llena de vida?
En varios países sobre todo en los países asiáticos, hay mucha tradición en el consumo de los brotes de soja y otras semillas germinadas en la dieta.
Últimamente hay un aumento en el consumo de germinados dentro de las ensaladas, aderezos, guisos y otros.
Pero es importante que saber que incluir germinados nos aumentará el valor nutritivo de lo que consumimos.
Los germinados son un concentrado de sustancias generadoras de salud, tienen más elevado su concentración de nutrientes que si los consumiéramos en harinas u otras formas.
El contenido proteico de las semillas es insuperable y proporcionan más vitaminas, minerales, enzimas, clorofilas, aminoácidos, oligoelementos que otros alimentos; ayudándonos a equilibrar las carencias de la alimentación.
Las semillas ideales para germinar son los cereales o leguminosas.
Cuando germinan se convierten en alimentos de fácil absorción, porque liberan todos los nutrientes encapsulados y por lo tanto mejoran el valor nutricional de la semilla y consumimos el germinado de la futura planta o fruto.
Debemos tener la certeza que son alimentos vivos y esto es lo que aumenta el valor nutricional y se mantiene intacto hasta que se consume.
Otra ventaja es que es un alimento predigerido, quiere decir que es un alimento muy digerible, adecuado para los estómagos delicados.
La enorme ventaja es que los germinados los podemos cultivar nosotros/as en casa. Son muy económicos y tenemos la seguridad de consumir un alimento que no ha sido adulterado, ni rociado con insecticidas o agroquímicos. Se aconseja que se busquen semillas de buena calidad biológica, para que germinen sin problema.
Lo que ocurre cuando germinan las semillas es lo siguiente[1]:
- El almidón de la semilla se convierte en azucares simples, decreciendo el índice glucémico.
- Las proteínas se convierten en ácidos grasos.
- Las sales se multiplican.
- Aumentan las vitaminas.
- Se sintetiza clorofila, lo que le confiere a los germinados un gran poder antioxidante.
Nuestro médico nos aconseja incluir los germinados, por los nutrientes complejos de las semillas, que se transforman en nutrientes simples y son fácilmente asimilables por nuestro organismo.
El consumo de estos germinados, nos ofrece un concentrado de enzimas que ayuda al metabolismo a regenerar el torrente sanguíneo y los procesos digestivos.
En la actualidad las dietas suelen tener carencias de vitaminas básicas y el consumo de germinados, será un medio excelente para complementar la carencia de nutrientes y sobre todo con una excelente calidad.
Nos aconseja tener en cuenta que las semillas solanáceas, es decir tomate, pimiento, berenjena, patata y otras resultan tóxicas para germinar.
No todas las semillas germinadas son comestibles. Nuestro médico nos aconseja, siempre consultar al nutricionista. Y en caso de contraindicación médica eliminarlos de la dieta.
Las semillas ideales para germinar son las oleaginosas, los cereales, legumbres, otras como alfalfa, rábano, col, brócoli, albahaca, etc.
A continuación cuadro sobre el tiempo de remojo.[2]
Tipo de semillas | Tiempo de remojo | Tiempo de germinación en tarro. |
OLEAGINOSAS Girasol, Calabaza, Sésamo Almendra Avellana Nuez Piñón, anacardo/semilla de marañón Lino | 6-8 horas 24 a 48 horas 24 horas 6-8 horas 2-6 horas Mínimo 1 hora | 1 día. 1 día. Se puede usar tras el tiempo de remojo. Se puede usar tras el tiempo de remojo Se puede usar tras el tiempo de remojo Se puede consumir. |
CEREALES Trigo, centeno, avena, mijo, quinoa, kamut Trigo sarraceno Espelta | 8-10 horas 30 minutos 24 horas | 1-2 días. 1-2 días. 1-2 días. |
LEGUMBRES. Garbanzos, lentejas, judías mungo, judías azuki Guisantes | 8-12 horas 6-8 horas | 2-4 días. Se puede consumir tras remojar. |
OTRAS Alfalfa, rábano, col, brócoli | 6-8 horas | 4-6 días. |
Hay muchas formas de hacer germinados en la tierra, pero te explicaremos una forma sencilla para hacerlos desde casa.
Los cultivos hidropónicos o en tarros de vidrio.
Para germinar necesitaremos cosas muy fáciles de conseguir:
1- Un tarro/cuenco de vidrio.
2-Tela mosquitera.
3-Una goma elástica y agua filtrada.
También hay en el mercado germinadores, pero de no encontrarlos, puedes hacerlo de forma casera.
Te explicamos a continuación:
1- Ponemos las semillas a germinar en el tarro o cuenco de vidrio.
2- Se pone el doble de agua, de la cantidad de semillas.
3- Dejamos en reposo las semillas, basándonos en la tabla anterior de remojo.
4- Tapamos el cuenco con la tela mosquitera y sujetamos con la goma elástica.
5- Escurrimos las semillas varias veces e inclinamos el cuenco unos 45º grados. Esto nos ayudará a que no se amontonen las semillas.
6- Dejamos nuestro cuenco/tarro con las semillas en un lugar fresco y alejado de la luz directa.
7- Cada día hay que enjuagar nuestra semillas. Debemos quitar el exceso de agua para evitar que se pudran.
Nos basamos en la tabla de germinar.
Cuando germinen hay que consumirlos.
Te mostramos un vídeo de la elaboración de germinados:
https://www.youtube.com/watch?v=wi7BMgC3mVM
[1] Fernandez Odile, Mis recetas anticancer, Alimentación y vida anticáncer. Ediciones Urano. 2013 Junio; 332-334
[2] Cuadro obtenido en la siguiente fuente: Fernandez Odile, Mis recetas anticancer, Alimentación y vida anticáncer. Ediciones Urano. 2013 Junio; 333 -334