Torre y dos peones contra torre y dos peones
(40) Finales de torres
T+2P contra T+2P
(Guillermo Gutiérrez)
En las lecciones precedentes hemos presentado varios tipos de finales de torres y dos peones contra torre y un peón.
En los análisis se experimentaron diversos procedimientos, tanto para atacar como para defenderse, pudiendo apreciarse que, a pesar de lo limitado del material, no es tan sencilla la conducción exacta del juego, lo mismo si se refiere al bando fuerte que al débil.
Además, y como ha se ha indicado en otras ocasiones, es imprescindible conocer a fondo los finales con todavía menos material.
En la presente y sucesivas lecciones vamos a estudiar finales con un mayor número de peones (dos contra dos, tres contra dos y tres contra tres peones). No es necesario insistir en que, dado el hecho de que se hallan en el tablero de seis a ocho piezas, sin contar los reyes, las complicaciones aumentan y la forma de explotar las diferentes posibilidades son más difíciles de encontrar.
Nos limitaremos a estudiar esquemáticamente los finales básicos y que se presentan con frecuencia en la práctica.
Las ideas fundamentales y la experiencia técnica que en estas lecciones serán tratadas, como el aislamiento del rey enemigo de los peones libres, tanto para el ataque como para la defensa; la situación de las torres, delante o detrás de los peones libres; la activación del rey y de la torre, y otras más, tienen pleno efecto también para el tratamiento de finales con mayor cantidad de peones.
Algunas ideas fundamentales van ilustradas con una serie de ejemplos seleccionados. También, al lector, se le hace un llamado a la atención sobre la importancia de los métodos estratégicos, cuya trascendencia se incrementa a medida que crece el material en el tablero, en especial cuando se trata de arbitrar planes para la transformación del final en otro más sencillo, que ya hemos estudiado en lecciones precedentes.
La posición de análisis que nos ocupa, ha sido tomada de la partida P. Keres contra A. Alekhine, del torneo de A.V.R.O. de 1938. Cada uno de los adversarios tiene dos peones libres y unidos.
La ventaja de las blancas consiste en que sus peones se encuentran más adelantados y, además, les corresponde jugar en esta posición.
La proximidad de las casillas de transformación crea diversas posibilidades tácticas, como ya hemos visto en numerosos ejemplos.
Es de considerar también que la torre blanca puede detener el avance de los peones contrarios si éstos no reciben el apoyo de su rey. La centralización del rey blanco es mucho mejor que la de su colega negro.
La partida concluyó en tablas, pero análisis posteriores demostraron que las blancas podrían ganar prosiguiendo así: 1.c6! Re7 2.Td4! (En la partida original se jugó 2.b5? y luego de varias jugadas se acordaron las tablas.
Esta jugada es un error instructivo. Lo mejor es detener la marcha del monarca negro, cortándole el paso con 2.Td4.) 2...Tc2 (También existía la opción de 2...Tb2 pero entonces las blancas podrían responder con 3.Rd3 Tb1 4.Rc2 Ta1 5.c7 Ta8 6.b5± y la posición blanca mantiene la ventaja.) 3.b5 (Podrían jugar las blancas 3.Td7+ con lo que mantendrían la ventaja, pero la variante debe ser calculada con precisión luego de 3...Re6 4.b5 Tc5 5.Tb7 Rd6 6.Rd4±) 3...Tc5 4.Tb4! Rd8 5.b6 Rc8 6.b7+ Rb8 7.Tb6 Tc1 8.Ta6 Tb1 9.Ta8+ Rc7 10.Tc8+ Rd6 11.b8D+ y el blanco gana.
El aislamiento o separación del rey enemigo de sus peones es la estrategia justa a seguir en posiciones de éste tipo. No atender a éste sencillo método cuesta en ocasiones no ganar la partida.
(41) Finales de torres
T+2P contra T+2P (2)
(Guillermo Gutiérrez)
Ahora estudiaremos posiciones en las que el avance de un peón libre está apoyado por la torre desde atrás.
La colocación de una torre tras un peón libre propio, puede ser decisiva si dicho peón está detenido por la torre contraria, y no por el rey. Analicemos un ejemplo.
La posición ha sido tomada de una partida entre Maroczy contra Marco, disputada en el Torneo de Montecarlo en 1902. Las blancas jugaron: 1.Ta2! Tb3 de otra manera, e peón no podría ser detenido. 2.a6 Tb8 3.a7 Ta8 Y ahora, la torre negra queda excluida del juego.
El avance del peón "c" es inofensivo, porque el monarca blanco lo alcanzará. 4.Ta6! jugada que impide la maniobra Rf6-f5. 4...f6 5.Rf3 Rg6 6.Re4 c4 7.Rd4 Rf5 8.Rxc4 Rg4(Después de 8...Rxf4 9.Txf6+ Re5 10.Ta6+- el final estaría perdido, porque el rey blanco llega hasta la casilla b7; Tampoco es mejor para las negras jugar 8...Re4 porque después de 9.Rc5 f5 10.Ta4++- su posición se encuentra perdida) 9.Rd4 (También gana 9.Rb5 f5 10.Ta4 Txa7 11.Txa7 Rxf4 12.Rc4+-) 9...Td8+ 10.Re4 Te8+ 11.Rd5 Ta8 12.Re6 f5 13.Re5 Te8+ 14.Te6 Tc8 15.Te7 Rh5 16.Tf7+- y las blancas ganan la partida. (1–0)