Las mastabas
La arquitectura religiosa propiamente dicha se inició con las mastabas, pequeñas edificaciones de forma trapezoidal. En la parte superior se construía una capilla y una estancia dedicada al doble del difunto (ka). En la parte subterránea estaba la verdadera cámara sepulcral.
Este tipo de enterramiento pasaría a ser el modelo para los sepulcros de los nobles y las clases altas, y su evolución dará como resultado la pirámide.
Las agrupaciones más importantes de mastabas se encuentran en Gizeh y en Saqqara.
El complejo funerario del rey Zoser
Es el primer ejemplo de arquitectura monumental funeraria.
Fue ideado por el arquitecto Imhotep para el faraón Zoser (2800-2600 a. C.), que supone un cambio en la historia de Egipto por los grandes progresos que se realizaron en su época.
Se trata de un conjunto de edificios rodeado por una muralla de unos 10 metros de alto y dos kilómetros de perímetro. Dentro del recinto sobresale la pirámide escalonada. A su alrededor se distribuyen otras construcciones.