La impulsividad y la empatía
La impulsividad es uno de los factores de riesgo más potentes de las conductas delictivas, la búsqueda de riesgo y aventuras, la curiosidad y el deseo de superar el aburrimiento eran las razones más frecuentes dadas por los jóvenes a la hora de explicar su conducta delictiva, gracias a un estudio realizado con una muestra de delincuentes en prisión y adolescentes, concluyen que las personalidades antisociales puntuaban más alto en ausencia de miedo, búsqueda de sensaciones e impulsividad.
La Empatía, otro factor de riesgo. Bien sabemos, que los sujetos con personalidad psicopática, carecen de la misma, siendo éstos, individuos con una personalidad muy fría, incapaces de sentir remordimientos ni sentimientos de culpa. Estudios con niños o jóvenes antisociales y delincuentes han demostrado que éstos presentan ciertos déficit a la hora de identificar y comprender los estados internos de los otros (sentimientos).
Otro factor de riesgo es, la autoimagen es un factor relacionado con la conducta desviada. Los individuos con una autoimagen positiva muestran una menor vulnerabilidad hacia la conducta antisocial.
Sin embargo, una elevada autoestima puede llevar al adolescente a actuar de una forma agresiva ante cualquier situación que el considere inaceptable o que amenace su ego. Es importante recalcar que el narcisismo es también un factor de riesgo de la conducta delictiva.