Los estilos de comportamiento y comunicación
El comportamiento social de las personas podemos situarlo en un continuo de estilos de respuesta:
Continuo pasivo-asertivo-agresivo
Inhibido Asertivo Pasivo
Una persona que se comporta de forma inhibida no expresa con claridad lo que desea o lo que piensa, y por lo tanto es posible que no le respeten sus derechos, que elijan por ella, o incluso que se aprovechen de ella. El componente verbal y no verbal del comportamiento inhibido dan a entender a los demás ideas como: “yo no cuento”, “mis necesidades son menos importantes que las tuyas” o “eres más importante que yo”.
En ocasiones, puede ocurrir que el ser avasallados constantemente produzca en las personas explosiones de ira, como resultado de una acumulación de tensión, y se comporten de manera agresiva.
El comportamiento agresivo pretende conseguir los objetivos propios sin respetar los de los demás, o incluso a expensas de ellos, llegando incluso a avasallar a la otra persona. Los mensajes que llegan a los demás son del tipo “esto es lo que yo quiero, y es más importante que lo que quieres tú”, “esto es lo que pienso, y es correcto, a diferencia de lo que piensas tú”.
El comportamiento asertivo , sin embargo, respeta los derechos básicos de los demás, aún tratando de conseguir los objetivos propios. La persona asertiva no amenaza, no castiga a los demás. “Esto es lo que pienso”, “Esto es lo que siento”, “Yo veo así las cosas”, son ideas que transmite la persona que se comporta de forma asertiva.
En principio, el comportamiento asertivo es el más deseable ,ya que, como veremos a continuación, es el que más nos puede ayudar a comunicarnos y a la vez mantener nuestra red de apoyo social. Sin embargo, no olvidemos que el comportamiento es situacional: las cosas que decimos, hacemos, o pensamos tienen lugar en una contexto determinado, que es el que determinará en parte la utilidad de nuestro comportamiento.
En ocasiones puntuales, comportarnos agresivamente o, por el contrario, inhibidamente, nos llevará a obtener mejores resultados, pero debemos optar por la asertividad en la mayor parte de las situaciones, debido a las ventajas que conlleva a largo plazo.
A continuación se exponen las características básicas de los tres estilos de respuesta. Los modelos que se proponen son generales, no tienen que estar necesariamente todas las características presentes; cada persona tiene sus particularidades a la hora de comportarse.
Por otro lado, es muy importante tener en cuenta el hecho de que el comportamiento está condicionado por la cultura donde vivimos . Así, el hecho de calificar un comportamiento como asertivo, agresivo o inhibido no debe realizarse de forma taxativa. Hay culturas en las que se suele elevar más el tono de voz, o las personas se comunican situándose más cerca en el espacio.
También hay grandes variaciones culturales tanto en la clase como en la cantidad de tacto empleado en las conversaciones. No sólo podemos hablar de diferencias culturales; también haydiferencias en función del rol que tengamos en un momento determinado; una persona se comunica de manera diferente si está con sus amigos, su familia, sus compañeros de trabajo…
Por tanto, calificar un comportamiento como asertivo, inhibido o agresivo depende no sólo de las características del mismo, sino de los objetivos que se propone el comunicador así como de las consecuencias del mismo.