Cómo vestir (I)

El saber vestir distingue definitivamente a la persona elegante:

La elegancia es sobria: hay que ir elegante sin llamar la atención. Tan censurable es ir fachoso como sobrecargado ("overdressing").

Le elegancia es pulcra: ante todo hay que ir bien aseado, bien afeitado, bien peinado, dientes cepillados, uñas limpias, etc.

Ropa limpia, bien planchada, zapatos relucientes.

La elegancia es práctica: hay que vestir según la ocasión: a una fiesta hay que ir arreglado y al campo hay que ir informal (tan malo es ir a una cena en vaqueros, como al campo con chaqueta y corbata).

La elegancia es pudorosa: si es usted grueso no vaya con ropa señalada, trate de disimular su tripa, si tiene varices no vaya con minifalda, evite que se le señale la ropa interior, en la playa no vaya marcando sus atributos (por muy orgulloso que se pueda sentir).

La elegancia tiene personalidad: tenga su propio estilo personal, no se deje llevar permanentemente por los dictados de la moda.

Saber vestir es complicado y sólo el buen gusto, el sentido común y la experiencia nos permiten ir avanzando en el conocimiento de este difícil arte.

Las reglas del buen vestir son variadísimas, pero hay unos estándares mínimos que toda persona debería conocer y respetar:

El chándal se utiliza exclusivamente para hacer deporte: ir en chándal por la ciudad no es apropiado.

Los calcetines blancos se utilizan para jugar al tenis, y nada más. Tampoco calcetines pastelosos (color celeste, cremoso, grisaceo y otras variedades).

Las camisas interiores de tirantes tan sólo la utilizan ya personas mayores. Entre la gente joven han quedado totalmente desfasadas.

Los zapatos de rejilla no son especialmente estéticos.

Sandalias de hombre (¡¡ glubbb !!) y además con calcetines (peor).

No se debe llevar el manojo de llaves asomando por el bolsillo.

Los hombres sólo deben llevar la alianza, ningún otro anillo es admisible y menos "pulseritas" con el nombre de la novia (¡¡ Por Dios !!).

Bolsos de hombres, vulgarmente conocidos como "mariconeras": hay que evitarlos.

Móvil colgando del cinturón (abstenerse).

Gafas de sol en días de invierno con un cielo plomizo (sin comentarios).

Peluquines: no son aceptables. La calvicie hay que aceptarla con elegancia.

Las mujeres no debe ir exageradamente perfumadas, puede que el perfume que utiliza no sea del agrado general.

 

Contenidos que te pueden interesar
Este sitio usa cookies para personalizar el contenido y los anuncios, ofrecer funciones de redes sociales y analizar el tráfico. Ninguna cookie será instalada a menos que se desplace exprésamente más de 400px. Leer nuestra Política de Privacidad y Política de Cookies. Las acepto | No quiero aprender cursos gratis. Sácame