Lavado del cabello
El cabello de tus clientes debe estar limpio y manejable para que puedas trabajar sin dificultad.
Para eso pídele a tu cliente que:
- Que se recueste en la estación de lavado.
- Verifica que el agua este templada.
- Moja completamente el cabello, desde la zona de crecimiento hasta las puntas.
- Aplica el shampoo adecuado, según el tipo de cabello.
- Espárcelo con las yemas de los dedos de manera circular desde la raíz hacia las puntas.
- Enjuaga eliminando todo el resto de jabón.
- Aplica acondicionador desde la mitad del cabello hacia las puntas.
- La aplicación del acondicionador debe ser así para evitar la caída del cabello y el cabello grasoso.
- Si el cabello del cliente es corto, no aplicar el acondicionador.
- Consultar en la etiqueta del producto el tiempo que debe dejarlo.
- Después enjuágalo y presiona levemente para eliminar los restos de agua.
- Envuélvelo con una toalla limpia y frota para absorber la humedad.
- Para desenredarlo pide al cliente que pase a la silla y coloca una toalla seca en sus hombros.
- Mientras el cabello sigue húmedo, peínalo de la mitad hacia las puntas, hasta que el cabello se deslice sin problemas.
- Después pasa el cepillo desde la raíz hacia las puntas.