Envases y embalajes
Cuando se vende un producto lo normal es que el precio del envase o embalaje que lo protege vaya incluido en el precio de la venta, sin que, por tanto, el comprador tenga obligación de devolverlo.
Al ir incluido en el producto que se vende no genera un asiento contable independiente, sino que va contabilizado dentro de la operación de venta.
Por ejemplo: Una empresa vende una partida de libros por importe de 1.000 euros. El embalaje de los libros va incluido en el precio.
No obstante, en algunos casos particulares (botellas de bebidas, bombonas de gas, etc.) el envase o el embalaje no van incluido en el precio de la venta por lo que el cliente tiene obligación de devolverlos. En caso de no hacerlo tendría que pagar su precio.
Inicialmente, cuando se realiza la venta se supone que estos envases y embalajes van a ser devueltos y se contabilizan de la siguiente manera:
La cuenta "Envases y embalajes a devolver por clientes" es una cuenta que va en el Activo consigno negativo, disminuyendo el saldo de la cuenta de clientes.
En el momento en que el cliente devuelve los envases o embalajes se cancela el saldo de la cuenta mediante el asiento contrario:
Si el cliente no procede a su devolución entonces tiene obligación de pagar su importe, en definitiva, viene a ser como si adquiriera estos envases y embalajes. El asiento que se realiza es el siguiente:
La cuenta "Ventas de envases y embalajes" es una cuenta de ingresos (como cualquier venta) y al cierre del ejercicio se lleva a pérdidas y ganancias.
Veamos un ejemplo:
Una empresa de gas vende una partida de botellas de butano. El importe de la venta asciende a 10.000 euros, no incluyendo los recipientes que deberán ser devueltos. El valor de estas botellas asciende a 500 euros.
En el momento de la venta se realiza el siguiente asiento:
Llegado el momento de la devolución:
a) Si el cliente procede a devolver los recipientes:
b) Si el cliente no devuelve estos envases: