Reproducción artificial de la carpa común
Después de preparar tanto a los machos como a las hembras alrededor de dos a tres meses dándoles una dieta con un 30-40% de proteína, se les inyecta luego de su elección a cada hembra extracto de pituitaria (1° inyección a las 6:00 p.m. y a las 12:00 de la medianoche, a los machos se le hace una aplicación única). Al cabo de 12 horas, a las 6:00 a.m. se extraen los reproductores de los tanques que los contienen, uno por uno después de observar el comportamiento de las hembras, debido a que se ponen lentas.
Éstas se manipulan con cuidado, usando una toalla limpia se les cubren los ojos y un operario le fricciona la barriga y la zona del poro genital a manera de estímulo. De esa manera, en una ponchera o cacerola limpia caen los huevos y el semen.
Entonces con una pluma de ave limpia se mezcla el material genético por unos 10 minutos y se lava con una solución de tanino. Esa mezcla se lleva a los conos de incubación preparados para el caso (conteniendo agua limpia corriente), y así se inicia la incubación de aquellos; con una duración aproximada de 18-24 horas.
El agua de los conos de incubación cae a un tanque de unos 500-1.000 litros donde según eclosionan los huevos por efecto del flujo de agua van cayendo suavemente las larvas de peces.
Las larvas que nacen tienen un saco donde tienen nutrientes acumulados, que les permiten poder alimentarse por lo menos durante la primera semana de nacimiento.
En la fase de incubación artificial al personal a cargo del proceso se le requiere estar alerta y vigilia desde el momento en que los padrotes son inyectados para el proceso de inducción al desove artificial. De esa forma el porcentaje de eclosión se eleva hasta un 40% (en el medio exterior apenas es de 1%). En cuanto a las carpas cabezona, hervíbora y plateada el procedimiento es el mismo.