Sombrear con el difumino (1)
Aquí vamos a hacer, con el carboncillo acostado, otra prueba para que veáis la diferencia entre el difumino y el dedo a la hora de hacer sombras.
Ahora tomamos el difumino y vamos a comenzar.
Seguimos difuminando.
Aquí vamos a hacer, con el carboncillo acostado, otra prueba para que veáis la diferencia entre el difumino y el dedo a la hora de hacer sombras.
Ahora tomamos el difumino y vamos a comenzar.
Seguimos difuminando.