Alimentos que con seguridad contienen gluten
Deben ser prohibidos.
- Pan y harinas de trigo, centeno, cebada y avena.
- Bollos, pastas italianas, pastas de sopa, galletas, bizcochos, magdalenas y pastelería en general.
- Sémola de trigo.
- Productos manufacturados en cuya composición entren cualquiera de harinas citadas y, en general, cualquier alimento preparado o manufacturado si el comerciante no específica que no contiene gluten.
- Alimentos malteados.
- Chocolates (excepto si existe declaración expresa del comerciante).
- Infusiones y bebidas preparados con cereales: malta, cerveza, agua de cebada.
Alimentos que pueden contener gluten
Solamente permitidos previo informe expreso del fabricante de que no contienen gluten.
- Charcutería en general (mortadela, salchichas, pasteles de jamón o carne).
- Queso fundido, queso en láminas, otros quesos sin marcas de garantía.
- Patés y conservas.
- Dulces y caramelos.
- Turrón, mazapán.
- Café y té instantáneos.
Alimentos sin gluten
Pueden consumirse libremente.
- Leche y derivados lácteos (queso, mantequilla, requesón, nata).
- Carne, pescado y mariscos frescos.
- Huevos.
- Frutas
- Verduras, hortalizas y legumbres (frijoles, arvejas, lentejas, soja).
- Arroz, maíz y tapioca (harina y almidón).
- Azúcar.
- Miel.
- Aceite
- Margarina.
- Sal, vinagre, pimienta, levaduras sin gluten, colorantes.
- Café y te natural (no instantáneos), hierbas aromáticas (manzanilla, poleo, hierba luisa).
- Bebidas carbónicas
NOTA: Se sobreentiende que todos estos alimentos están permitidos en su estado natural pero no en conserva. Con ellos puede cocinarse, preparar salsas y combinar entre sí.
Ciertos alimentos pueden contener o no gluten dependiendo de su procedencia: almidón modificado E-1404, E-1410, E-1412, E-1413, E-1414, E-1420, E-1422, E1440, E-1442, E-1450, fibra vegetal, fécula, proteína, proteína vegetal, colorantes, malta, extracto de malta, extracto de levadura, levadura, jarabe de malta, proteína vegetal hidrolizada, colorante, aromas, saborizantes, espesantes, gofio, almidón, fibra, harina, sémola, hidrolizado de proteína.
Cabe destacar que en algunos casos, en ciertos países algunas empresas han mostrado una preocupación y han certificado sus alimentos como libres de gluten.
La dieta no puede curar la enfermedad pero la controla. De modo que, con ella, se consigue la completa normalización clínica del sujeto que la padece y evita las posibles complicaciones a corto, medio o largo plazo.
No debe iniciarse una dieta sin gluten sin haber realizado previamente una biopsia intestinal que lo justifique, por la alteración de la mucosa.
La prescripción de esta dieta, sólo porque hay sospecha de intolerancia a esta proteína o por el resultado de los anticuerpos específicos elevados, sin haber realizado una biopsia intestinal que lo confirme, es un error que se comete con frecuencia y lo único que se consigue es retrasar o enmascarar el diagnóstico de una posible intolerancia celíaca.
La dieta debe seguirse durante toda la vida. Está demostrado que el consumo continuo de pequeñas cantidades de gluten, puede dañar severamente las vellosidades intestinales o provocar otras alteraciones y/o trastornos importantes nada deseables, incluso en ausencia de síntomas.
La dieta sin gluten permite la recuperación vellositaria, así como la desaparición de los síntomas.