Expresiones conectoras
Ya hemos hablado en la lección anterior de la necesidad de tener una serie de expresiones de las que echaremos mano a lo largo de todo nuestro trabajo. Es necesario que las vayamos alternando, de forma que las nuevas partes del texto no empiecen siempre de la misma forma.
Por ejemplo, si he empezado una frase con “asimismo”, no repetir esta expresión en las ideas más próximas y hacer mano de los sinónimos (por ejemplo, “igualmente”).
No repetir palabras constantemente en los mismos párrafos y páginas encontrando sinónimos de las mismas, nos ayudará a hacer también la lectura más fluida, ya que la repetición genera mucho ruido en el texto.
Procedamos ahora a explicar algunas de estas expresiones conectoras:
De un lado, por un lado, por una parte, etc.: Podemos usar cada una de estas expresiones para dar paso a una idea que contiene diferentes partes o a una enumeración de ideas.
Así, deberé empezar a argumentar la idea con alguna de estas expresiones para luego proceder la explicación de la otra parte con las expresiones de otro lado, por otra parte, por otro lado etc. Veamos un ejemplo:
No olvidemos que, tras los conectores, siempre va la coma.
En primer lugar, en segundo lugar, etc.: Estas expresiones son bastante usadas a la hora de abordar los textos. También se refieren a una enumeración de ideas, de ahí los números, aunque desde aquí desaconsejamos un uso reiterado de las mismas. ¿Por qué? Porque si bien pueden venirnos bien
en algunos momentos para poner en orden diferentes ideas de un texto, resultan expresiones menos atractivas que las arriba propuestas ya que la enumeración se hace demasiado obvia y la lectora o lector siempre tenderá a pensar que la lista de números (ideas) puede ser interminable; su interés, por tanto, puede decaer fácilmente.
En caso de que las usemos en alguna ocasiones, aconsejamos hacerlo en enumeraciones que no sobrepasen las tres ideas. Aconsejamos también anunciar antes que únicamente describiré tres ideas. Ejemplo:
Podemos sustituir “en tercer lugar” por “por último” ya que es una expresión más determinante y da más fuerza al texto a modo de cierre.
Seguimos con la explicación de unos últimos conectores en la próxima lección.
