Campo magnético creado por un solenoide
Seguramente te habrás preguntado ¿a qué viene todo este rollo?
Algo así sucede con el solenoide. Deseamos crear un campo magnético, la idea es buena pero los resultados son paupérrimos, apenas se nota nada.
Pero tenemos una importante ayuda con el de hierro. Con un trozo, si es cilíndrico mejor, para que encaje mejor por el interior del solenoide, que es el lugar donde se concentran más líneas de campo magnético:
¿Qué sucede? Al trozo de hierro le va la “marcha magnética” y potencia el débil campo del solenoide. Es que el hierro tiene una gran permeabilidad. Incrementa con creces el efecto magnético que recibe aunque éste sea débil.
Fíjate que si el agua, el cobre, el aluminio… tienen una permeabilidad relativa de casi 1, el hierro tiene más de 5000.
Al introducir un trozo de material que contenga hierro dentro de un solenoide hemos conseguido crear un electroimán.
Metemos el clavo anterior dentro del solenoide y colocamos un clavo pequeño cercano a él tal como ves en la figura siguiente:
En el momento de cerrar el circuito, el clavo pequeño ha sido atraído por el solenoide que se ha convertido en un electroimán:
¿Por qué cuando cesa la corriente, el clavo mayor no atrae ni a un delgado alfiler?
Sucede que al hierro le hace falta muy poca intensidad de campo magnético para que una gran parte de sus electrones se muevan coordinadamente, es decir, con la misma dirección y sentido. Cuando esto sucede sabemos que se produce a su alrededor un campo magnético. Recordemos a la magnetita.
En el momento en el que por el hilo de cobre del solenoide no hay corriente desaparece todo campo magnético.
Los electroimanes tienen importantes aplicaciones en la industria del automóvil (frenos, embragues…), interruptores, en medicina probablemente has oído hablar de la resonancia magnética, fabricación de motores, grúas para elevar cargas que contengan hierro o acero, lugares de reciclado, etc.
Los electroimanes están señalados en la foto con un círculo o elipse blanco.
Una vez que las mercancías de acero o hierro están colocadas en el lugar correspondiente cesa la corriente eléctrica.