Métodos de trabajo para la prevención de lesiones
Lesión deportiva: son daños producidos en el cuerpo (normalmente a nivel motor) que ocurren durante la práctica de un deporte o durante el ejercicio físico. Suelen ser causadas accidentalmente o por malas prácticas de entrenamiento, otra causa es el bajo estado o condición física.
“Hay deportes que favorecen la producción de lesiones de quienes lo practican por la energía dispensada en el mismo, por su violencia, o por la frecuencia e inevitabilidad del contacto” (Rechel JA, 2008).
“La prevención de lesiones y la intervención propiamente dicha por medio de la readaptación físico-deportiva deberían tener por objetivo el incremento de la “esperanza de vida deportiva” del deportista. Esto lleva consigo que muchos profesionales y deportistas se preocupen por el estado de salud buscando lo que podríamos denominar como un óptimo estado de salud-deportiva”. (Lalín, C.,2008).
Mediante una buena planificación y preparación física evitaremos, en la medida de lo posible, las lesiones. Para ello es indispensable introducir en nuestra programación un trabajo de prevención de lesiones basado en lo siguiente:
Core stability: se entiende por Core, el centro o núcleo de nuestro cuerpo y la musculatura que lo rodea. Comprende el diafragma, suelo pélvico, faja lumbar, cinturón pélvico -musculatura abdominal, lumbar, dorsal, paravertebral, etc.-. Su desarrollo evita lesiones y da mayor firmeza y estabilidad al cuerpo, protegiendo y fortaleciendo el tren inferior y permitiéndole realizar acciones rápidas y bruscas.
Trabajo o método funcional: “El entrenamiento funcional no es una tendencia más, una moda o un nuevo producto de una gran casa fabricante de maquinaria para gimnasios. El entrenamiento funcional consiste en entrenar y desarrollar programas de ejercicio (entrenamiento) utilizando los conceptos de anatomía funcional de manera práctica. Movimientos y ejercicios que mejoran la habilidad de un sujeto para realizar sus actividades diarias y deportivas con mayor eficacia y eficiencia”. (Introducción al Entrenamiento Funcional Por: Manrique Sanabria).
Fuerza excéntrica: aquellos ejercicios de fuerza donde la contracción muscular se realiza de modo excéntrico. Esto fomenta el crecimiento muscular de manera longitudinal, y evita el acortamiento, por lo cual contribuye paralelamente a la flexibilidad y a un mayor ROM (Rango de movimiento articular).
Propiocepción y equilibrio: entrenando el equilibrio mediante inestabilidades, como con el uso del Bosu o plataformas inestables. Recordamos que la propiocepción es una capacidad la cual depende de los mecano-receptores, que informan de la situación de los segmentos corporales, del cuerpo en sí y del nivel de tensión o relajación de los músculos. Ésto mejorará el funcionamiento de ciertas articulaciones propensas a lesionarse, como las rodillas y los tobillos.
Fuerza compensatoria e isométrica: destinada a fortalecer los músculos sobre los que se sustenta el tren inferior, y también para evitar descompensaciones musculares buscando el equilibrio. El método isométrico, es aquel donde se realiza el ejercicio de fuerza, sin generar movimiento, pero, igualmente, se enfrenta a una carga o a la propia gravedad. Al no generar movimiento es un método menos violento o brusco para nuestro cuerpo.
Fuerza básica: tonifica y fortalece músculos fundamentales en nuestra práctica deportiva. En el fútbol, es fundamental un desarrollo óptimo y equilibrado tanto del tren inferior como del tronco.
Imagen: http://www.f-marc.com/downloads/posters_generic/spanish.pdf