Identidad sexo/género: ¿quién soy?
Cuando hablamos de nuestra identidad estamos haciendo referencia a nuestros rasgos definitorios. Las características propias desde las cuales nos definimos son tanto objetivas (rasgos físicos, acciones, movimientos, etc.) como subjetivas (pensamientos, emociones, afectos, mundo inconsciente).
Así, la identidad sexual hace referencia a cómo nos identificamos en relación a nuestro sexo. Sería nuestra percepción de tener un sexo determinado.
Por otro lado, la identidad de género estaría relacionada con nuestra percepción subjetiva en relación a mi construcción como mujer u hombre.
Ante estas afirmaciones y lo visto hasta el momento, lo que inicialmente relacionamos es que la identidad sexual femenina correspondería directamente con una identidad de género mujer, pero esto no siempre es así.
La identidad es una categoría relacionada no sólo con la objetividad, sino con la vivencia y experiencia propia, con el plano subjetivo.
Esto permite mostrar que hay personas que su identidad sexual no es ni femenina ni masculina , o personas que tienen una identidad sexual masculina y una identidad de género de mujer.
Estas vivencias e identificaciones personales relacionadas con la identidad ponen de relevancia la importancia de tener presente que los cuerpos no son objetos sino cuerpos vividos y construidos en contextos y momentos históricos concretos.
Cuando eres hombre biológico o mujer biológica, sin conflicto de identidad de género, simplemente el tema no se plantea. Vives la vida como es. Quizá en algún momento pienses: la vida del hombre/mujer es más fácil/difícil. Pero no pasa de allí. Para el transexual la situación es totalmente diferente. No DESEA… sólo SIENTE.
Yo nunca he DESEADO especialmente ser mujer. Es más, tengo absoluta conciencia de que sería mucho más fácil la vida como hombre. Pero es un problema de IDENTIDAD. Y eso va como va...
En este testimonio vemos que la respuesta de quién soy es compleja. Cada persona se siente y se vive de diferentes maneras. Al mismo tiempo, en la sociedad hay estructuras que son muy sólidas. Por eso, si una persona con cuerpo de mujer dice que es hombre, encontrará muchas dificultades para responder al ¿quién soy? (de cara a la sociedad) pues no hay parámetros sociales que acojan muchas de las diferencias que se encuentran en la realidad personal.