La orientación sexual: las posilidades
Como bien sabemos, hay mujeres que sienten deseo sexual por otras mujeres y hombres que lo sienten por otros hombres, lo que se denominó como homosexualidad.
Además, hay personas que sienten deseo sexual por otras, sea cual sea su sexo, lo que se nombra como bisexualidad. Al mismo tiempo que hay personas que no sienten deseo sexual por ninguna persona, asexualidad.
Esta ruptura de la heterosexualidad no es aceptada todavía en muchos lugares y en aquellos que se reconoce, socialmente aún genera muchos rechazos. Esto es debido a que, al igual que el género se ha construido en base a una biología que se percibe como esencia del género, la heterosexualidad también se concibe como biológicamente determinada. Se piensa como la posibilidad “correcta” de relaciones sexuales sólo las que se dan entre hombres y mujeres, el resto no es natural.
Por lo tanto, la orientación sexual es otro concepto que necesitamos. Desde el punto de vista educativo es necesario ir rompiendo con barreras que promueven prácticas o pensamientos homofóbicos, por ejemplo.
El profesorado debe conocer qué es lo que implican estos conceptos y cómo la sociedad participa en la conformación de los mismos.
Las prácticas y los discursos discriminatorios tienen detrás toda una estructura que las sustenta. Hemos de conocerla para ir desmontando ideas para poder construir otras nuevas. Los nuevos focos nos servirán para crear una vida propia y desarrollarnos como personas más plenamente.