Clasificación de los aceites
La clasificación de los aceites por tipo y función es la siguiente:
1. Vegetal: Obtenidas principalmente de semillas o granos, tales como los provenientes de soja, ricino, linaza, semilla de algodón, de coco, de palma.
2. Animal: Son grasas saturadas por lo tanto se debe limitar su consumo, en comparación con los de origen vegetal que son ricos en ácidos insaturados. Los más comunes destacan el aceite de pescado, aceite de esperma, entre otros.
3. Esencial: Son los obtenidos de las flores, troncos, hojas, cascaras, cortezas, flavedo (capa externa del fruto, siendo éste el caso de los cítricos), e incluso de la planta entera. Están compuestos por terpenos, que son sustancias aromáticas con gran uso a escala de la industria de cosméticos, alimentos, y para la técnica de aromaterapia. Los más comunes se extraen de las plantas de: romero, tomillo, limón, naranja, mandarina, cedro, lima, clavo, lavanda, mostaza y otros.
4. Comestible: Son derivados de frutos o semillas de las plantas y usadas principalmente en alimentos. Los aceites vegetales comestibles tienen una función vital en nuestro organismo y constituyen una de las más importantes fuentes de energía, indispensable para mantener el equilibrio de lípidos, colesterol y lipoproteínas que circulan en la sangre, proporcionan vitaminas A, D, E y K y no aportan colesterol. Los más comunes son extraídos de las semillas y/o granos de maíz, de girasol, de aceitunas, de soja.