El método del bancal profundo
Este método de cultivo, es muy interesante para nosotros si queremos sacar el mayor rendimiento posible a un espacio pequeño.
Consiste en cavar con una profundidad de unos 50 cm. de profundidad, airear la tierra, abonarla y no pisarla nunca para que el crecimiento de las raíces de nuestros cultivos se expandan fácilmente, las raíces crecerán en profundidad en vez de horizontalmente, rindiendo así más la productividad de nuestros bancales y pudiendo poner más plantas en menos espacio.
A este tipo de bancal se le suele dar un ancho de 1,50 metros a 1,80 metros, para poder acceder al cultivo del bancal por ambos lados sin tener que pisar o apelmazar jamás la tierra..
La producción de un bancal profundo, puede llegara a ser cuatro veces superior a la de un bancal normal.
Un bancal profundo puede tener unas medidas de 6 m x 1,5 m, unos 9 metros cuadrados, este bancal bien gestionado puede llegara dar al año entre 80 y 180 kg de hortalizas, cantidad aproximada que necesita un adulto para satisfacer sus necesidades de verduras.
A continuación vamos a ver paso a paso:
1.-Una vez que hemos decidido el lugar donde pondremos nuestros bancales y la orientación, marcamos la zona con cuatro estacas bien clavadas en las esquinas y atamos una cuerda alrededor, y pasamos a airear la tierra, dependiendo de lo compacta que este, podemos empezar abriendo el terreno con una azada o un pico, y después con la zoleta. Las piedras de mayor tamaño y las raíces internas las podemos ir apartando.
2.- Una vez abierto y aireado el terreno, delimitamos los bancales dentro del área seleccionada, de la misma manera que marcamos el área total, con estacas y cuerdas.
Hay que tener en cuenta, que el ancho de los bancales ha de ser de 1,50 metros aproximadamente y los pasillos entre bancales de unos 50 centímetros para que quepa bien la carretilla, y el largo dependerá del espacio que dispongamos, pero unos 6 metros es un buen largo.
Una vez marcados colocamos encima de los bancales un manto de estiércol compostado.
3- Ahora realizamos una zanja de una palada de profundidad, y el ancho de la pala a ambos lados de cada bancal. Y así iremos mezclando el composto con la tierra.
Se hace una segunda zanja y echamos la tierra y compost que sacamos al hacer la primera zanja. Una vez hemos terminado cada bancal podemos pasar la laya para mezclar mejor.