Removemos la tierra con el rastrillo
Primero removemos la tierra con el rastrillo pequeño para poder hacer los agujeros .
Con la pala abriremos un agujero de 15 centímetros de profundidad.
En el fondo de cada agujero colocaremos unos granitos de abono que contenga en su fórmula alto contenido de fósforo y nitrógeno pues son los elementos que necesitaran las raíces para evitar un poco el estrés en el momento del trasplante.
Así tenemos listos ya los primeros tres agujeros.