Característica de la voz como sonido

Característica de la voz como sonido

- Extensión

    La extensión general de la voz hablada es el espacio que va de la nota más alta a la más baja de la que es capaz la voz humana.

    Para la voz cantada, la extensión se refiere a cada registro y es por lo general de 2 octavas. La extensión de la voz hablada corresponde aproximadamente a la mitad por cada registro o tono de la voz cantada. 

    Pero así como los ejercicios del canto, pueden ampliar la extensión en una octava más, del mismo modo el ejercicio amplía considerablemente la Extensión de la voz hablada, lo cual es muy precioso para el actor. 

 

- Timbre

    Musicalmente se da el nombre de timbre a esa cualidad peculiar y especial que diferencia, a una misma nota de idéntica altura e igual intensidad, pero emitidas por diferentes instrumentos.

    El timbre sería lo personal de cada instrumento. Las laringes humanas, serían otros tantos instrumentos musicales o cajas de resonancia, pues sus sonidos presentan un sello peculiar a cada individuo, a igual que sus fisonomías, sus rasgos personales.

    Sin ver a una persona, la reconocemos por su voz; es lo personal de cada uno; lo individual de esa voz, no es ni su altura, ni su volumen, condiciones que pueden ser comunes a muchísimas voces.

    Se nace con él, puede ser bello o no, como un rostro o un cuerpo, pero así como la gimnasia mejora la plástica de los cuerpos, los ejercicios vocales, también mejoran y hacen hermoso el timbre.

 

- Alcance

    Alcance es la capacidad de una voz para hacerse oír, sin esfuerzo, desde un punto distante de la emisión vocal.¿Cuál es el punto a que debe llegar nuestra voz, la del maestro, la del actor? La fila más distante de espectadores, de oyentes, pues de sonido se trata.

    Se hable alto o bajo, con mucha o poca voz, de prisa o lento, se grite o se susurre, es absolutamente necesario que la palabra, la frase que llegue íntegra a todo el auditorio, hasta el último espectador u oyente más alejado, en la totalidad de sus sílabas y matices expresivos.

    En la voz del actor, del maestro, del orador, puede cambiar todo, menos el alcance vocal, pues lo único que no varía en el teatro, sala o clase, es la distancia que media entre quien habla y quienes escuchan.

    La práctica del alcance se conoce con el nombre de colocación de la voz, en general llamada impostación.

    Las escuelas tradicionales de la impostación de la voz buscan en las cámaras vocales del alumno el punto donde colocar o impostar la voz, que puede ser: los dientes, o la mascarilla del rostro, o la garganta y otros.

    Se cree que una vez apoyada en el punto escogido, de acuerdo a las condiciones vocales del alumno, la voz se proyecta integralmente hacia afuera, como un haz de luz proyectado por un reflector, en una especie de concentrada sonoridad.

    Esto es para el canto. La voz hablada, dispone de otro medio para el alcance, que es la articulación.

    Autoridades en la materia, expresan que, cuando en una sala se grita a un actor más alto es que éste articula mal. Frente a las escuelas tradicionales de impostación se ha levantado la voz eminente del sabio francés Bonnier, que niega eficacia a los viejos métodos, y les hace cargar con la responsabilidad de muchas voces perdidas para el arte.

    Bonnier famoso especialista de la laringe y fisiología de la voz, dice que la voz no debe ser encerrada con el pretexto de colocar o de impostar, sino que por el contrario se le debe dar libre salida a fin de que la voz se coloque en la sala de audición.

    Agrega que hablar o cantar es hacer hablar o cantar a la sala misma y es también producir al máximo efecto con el mínimo esfuerzo en los oídos  del público, oídos que también forman parte de la sala hecha sonora.  

    El conflicto planteado entre la tradición y la opinión revolucionaria de Bonnier, sería problema para el cantante, pues el hablante cuenta con la articulación y el apropiado volumen para dar el debido alcance a su voz. En cuanto a la altura ha de mantenerse corriente en los grados superiores del tono medio.

    Gritar para hacerse oír es desagradable y anti-artístico. Fatigoso para el actor y para el público.

 

Comprobación de la voz

    Para comprobar la voz en su volumen, extensión y altura, así como sus efectos, se aconseja una forma de emisión, que viene a ser como el pasaje de la voz en su estado natural.

    Después de haber inspirado de manera plena por la nariz se abrirá la boca separando bien los dientes, y se mantendrá la lengua extendida sobre el maxilar inferior.

    En dicha posición se emitirá y sostendrá una emisión de voz hasta que de el aliento: en el tono medio; en el tono bajo y agudo. Este ejercicio mostrará los puntos débiles o los defectos de la voz y servirá para apreciar los progresos logrados por el tratamiento vocal, destinado a robustecer o a corregir las deficiencias notadas.

    El alumno debe ser el artífice de su propia voz y quien debe mejorar su laringe y aptitudes vocales, con perseverancia y método. Por buenas cualidades que sean las de una voz en estado natural, siempre es posible mejorar y aumentar el tesoro vocal, sometiéndola a los ejercicios.

    Todos los que aspiren a cultivar el Arte de Decir deberán comenzar paciente y diario los ejercicios para la voz como simple sonido.

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