Recortamos cada pieza
Tomamos los siete enanitos. Vamos a ir recortando de uno en uno, separándolos, sin cortar la parte que toca con el cabecero de la cama: las narices.
Como ves aquí, damos forma a los enanitos para que parezca que unos están delante de otros, para darles volumen: no todos están en el mismo plano.