Baterías o acumuladores
Las baterías o acumuladores son células electroquímicas en las que las reacciones en los electrodos son reversibles, por lo que pueden ser utilizadas para acumular la energía solar fotovoltaica y luego liberarla cuando se conectan a un circuito de carga exterior.
Se encargarán de cubrir las demandas energéticas de las cargas del sistema, sin tener en cuenta la electricidad que se esta generando en el momento el campo fotovoltaico.
Las baterías constan de:
1. Células: es el elemento electroquímico que se constituye por un grupo de placas cargadas positivamente y por otro cargadas negativamente, entre las cuáles existen separadores fabricados por un material aislante, todo el conjunto de placas positiva y negativas están cubiertas por un electrolito que permitirá las reacciones químicas para la acumulación de electricidad.
Las baterías más usadas en las instalaciones fotovoltaicas son las que están constituidas por Plomo y un ácido como electrolito, se denominan de Plomo-ácido (Pb-a), y cada célula de la misma puede dar una tensión nominal de 2V.
2. Placas: consisten en unas rejillas con material activo denominado electrodo. En cada célula hay un numero de placas conectadas en paralelo a un bus situado en la parte superior de las placas.
3. Rejillas: distribuye la corriente por toda la placa y actúa como soporte de la materia activa. En las baterías de plomo-ácido está formado por una alineación de plomo.
4. Materia activa: en las baterías de Pb-a es el óxido de plomo (PbO2) en la placa positiva y el plomo (Pb) en la parte negativa
5. Separadores aislantes: se elaboran con materiales plásticos porosos para permitir la adecuada acción del electrolito (ácido en baterías de Pb-a).
6. Electrolito: es el encargado de transportar la carga eléctrica entre los electrodos positivo y negativo.