Regulación y adecuación de la corriente
Etapa de regulación.
Esta es la etapa más importante de la instalación. Consiste en interconectar paneles, baterías y receptores para que puedan funcionar en sintonía sin perjudicar el funcionamiento de ninguno de ellos. Esta labor la realiza el regulador. Este aparato desarrolla tres tareas fundamentales:
- Evitar sobrecargas en las baterías que puedan producir daños. Esto lo consigue controlando la cantidad de intensidad que le puede llegar al sistema de acumulación. Esta cantidad de corriente depende de los tipos de baterías usados y del número de baterías del que se dispongan.
- Impide la descarga de las baterías, en periodos de luz solar escasa. Esto lo consigue actuando como un interruptor, seccionando la instalación cuando los paneles empiezan a consumir energía eléctrica, esto ocurre cuando la luz que incide sobre ellos no es suficiente para producir.
- Asegura el funcionamiento del sistema en el punto de máxima eficacia.
Las características eléctricas de los reguladores son las siguientes:
- Tensión de funcionamiento: es la tensión a la que debe estar conectado el sistema generador (paneles), normalmente 12 o 24V.
- Intensidad de carga: se corresponde con la máxima intensidad que puede entregar el sistema generador en servicio permanente.
- Intensidad de descarga: es la máxima intensidad que puede entregar el regulador de manera permanente. Este valor debe corresponderse con la capacidad máxima del sistema de acumulación, de esta manera se evitarán sobrecargas en las mismas.
Etapa de adecuación
La corriente producida por los paneles fotovoltaicos, es de carácter continuo, y oscila entre los 12 o 24 voltios. Los receptores que se conectan al sistema solar NO SIEMPRE utilizan este tipo de corriente eléctrica, por lo que se hace necesario adecuarlo a las necesidades reales de la instalación. De esta labor se encargan los convertidores de onda-tensión. La principal función de estos equipos es la de recibir una corriente continua a 12 o 24 voltios y devolverla a 230 voltios en corriente alterna. Hay un posibilidad de evitar tener que usar este aparato, esto supone la utilización de receptores adaptados al tipo de corriente que se genera en los paneles solares, algo que no es muy común ya que este tipo de receptores son muy específicos.
Existen tres tipos de convertidores atendiendo al tipo de onda que devuelven a su salida:
- De onda cuadrada: son los más baratos pero los menos eficaces. La onda que obtenemos a su salida está muy poco elaborada, pudiendo provocar el mal funcionamiento de algunos receptores.
- De onda senoidal modificada: sin llegar a ser una onda senoidal pura, consiguen aproximarse bastante a ella. Son más caros que los anteriores.
- De onda senoidal pura: son los más caros. Incorporan una electrónica muy compleja. Consiguen una onda senoidal pura, lográndose así un correcto funcionamiento de la instalación, dando la posibilidad de conectar cualquier tipo de receptor de funcionamiento alterno.