Otras fuentes menos conocidas
Además de los diferentes tipos de energías renovables que se han podido estudiar en temas anteriores, existen una serie de tecnologías que utilizan fuentes alternativas y que aún se encuentran en fase de experimentación. Muchas de ellas pueden parecer realmente extrañas pero cabe mencionarlas en este apartado para demostrar, que todavía existen muchas fuentes naturales de energía por explorar y que vale la pena seguir investigando e imaginando nuevas formas de producción. A continuación se han elegido los siguientes ejemplos:
1. Potencia Osmótica: también conocida como energía azul es obtenida por la diferencia de concentración salina existente entre el agua de mar y el agua dulce presente en tierra firme. Mediante el proceso de ósmosis, se consigue aprovechar el flujo de agua que se produce entre la masa de agua dulce y la de mayor salinidad, a través de una membrana semipermeable, para producir energía útil. Si bien, lo cierto es que actualmente es una tecnología poco desarrollada y su coste es muy elevado.
2. Energía Sónica: es una de las alternativas más llamativas y creativas, y tiene su origen en los estudios llevados a cabo por el físico Orest Symko de la Universidad de Utah y sus estudiantes, los cuales han desarrollado una tecnología capaz de generar energía por medio de un sistema que a partir de un calor excesivo produce un fuerte sonido el cual, a su vez, genera electricidad. Aún está en fase de desarrollo pero ha generado un elevado interés en la comunidad científica.
3. Bicigeneración: básicamente consiste en acoplar al mecanismo de giro de en una bicicleta fija, un alternador conectado a su vez a un acumulador (batería) que almacene la energía producida. Este sistema puede ser especialmente útil en gimnasios de gran tamaño y en este sentido se están llevando a cabo algunas experiencias en ciertos lugares del mundo. Según Arturo Osorio, de la Universidad Juárez Autónoma de Tabasco (México), un grupo de 20 bicicletas estáticas puede llegar a producir hasta 7,5 kW de potencia.
4. Energía de la fotosíntesis: esta idea es quizás la más novedosa de cuantas se han expuesto aquí, este proyecto fue el ganador del concurso C2C HOME que convocó al público para crear diseños de edificios residenciales autosuficientes. El proyecto ganador se basa en un sistema solar-celular inspirado en la fotosíntesis de las plantas (en este caso se usan espinacas), y utiliza un complejo enzimático llamado Fotosistema I para generar electricidad del mismo modo en el que la planta obtiene su energía.