Cadencias I. Final en reposo
Una cadencia es un final de reposo o de tensión que se encuentra al acabar un pasaje. Seguramente usted conozca ya las principales cadencias; vamos a ver cómo tratarlas desde el punto de vista de la homofonía, y si no las conoce, también le servirá para conocerlas.
- Cadencia Perfecta: final en reposo. V-I, ambos en estado fundamental. La fuerza de la cadencia perfecta, con la que cierra el pasaje, está directamente relacionada con la nota de la voz más aguda: es preferible, para una fuerza mayor, que la soprano termine en la fundamental de la tónica. Si el V no tiene 7ª de dominante y la soprano hace un movimiento sensible-tónica, los dos acordes estarán completos; si se trata de un V con 7ª, o la soprano hace un movimiento 5ª (de la dominante)-tónica (grado conjunto), el acorde final deberá estar incompleto, sin 5ª y con la fundamental triplicada. Suprimir la 5ª es frecuente en los finales importantes.
También podríamos, de ser necesario, colocar alguna otra nota en la voz superior, pero la cadencia no tendría la misma fuerza.
Cadencia Imperfecta: igual que la perfecta, pero al menos uno de los dos acordes está invertido.
Cadencia Plagal: final en reposo, IV-I, estando al menos el último en estado fundamental. A veces puede utilizarse VI-I o II-I. All igual que en la cadencia anterior, puede utilizarse cualquier nota del acorde en la voz superior; sin embargo; en este caso se prefiere utilizar la 3ª, que además puede ser duplicada si viene bien para evitar faltas armónicas.
Duplicando la 3ª en el segundo ejemplo