Usos de la coma, el punto y coma, y el punto

Vamos a imaginar que la coma, el punto y coma, y el punto son empleados de una empresa, militares o cualquier puesto que se nos ocurra en el que exista una jerarquía.

Según esta jerarquía, en el puesto más alto estaría el punto, después el punto y coma, y finalmente la coma.

El punto lo utilizamos para separar frases u oraciones diferentes. Puede ser punto y aparte o punto y seguido, según se escriba la siguiente oración tras el punto o en otro párrafo.

Por ejemplo: Laura está cantando. Mañana sale rumbo a Barcelona. 

El punto y coma es usado para separar secuencias o frases que están relacionadas pero que son sintácticamente independientes.

Por ejemplo: cierra la herida; habrá que avisar a los familiares.

La coma la usamos para separar secuencias o frases que están mucho más relacionadas que las anteriores, que forman parte de la misma oración. También para separar incisos o enumerar elementos. 

Por ejemplo: compramos plátanos, pan y agua.

En realidad podemos utilizar todas estas de manera indiferente, pues no modifican el significado de las frases ni su contenido, sino que lo hará sobre la estética y el efecto que se pretenda crear.

Por ejemplo:

Está a salvo, gracias a Dios. / Está a salvo. Gracias a Dios.

En este ejemplo podemos apreciar cómo el punto, al leer la frase da un efecto más tremendista, más impactante que la coma.

Otra cuestión a tener en cuenta es que todos estos signos se escriben justo tras la última letra de la palabra que le precede, dejando un espacio con la palabra que le sigue.

Por ejemplo: Juan vino, luego se marchó (correcto) / Juan vino ,luego se marchó (incorrecto) / Juan vino , luego se marchó (incorrecto)