Paradigmas teóricos
La ASC constituye diferentes paradigmas, los cuales tratan de entender el papel del animador/a, la intervención y la realidad vista desde diferentes perspectivas. Por ello, Caride (1997) propone tres perspectivas en cuanto a la orientación del conocimiento teórico de la animación sociocultural, que se podrían resumir en los siguientes puntos:
- Modelo tecnológico: en este modelo nos encontraríamos con una animación basada en la tecnología social, partiendo desde una perspectiva positiva que es consciente de la actual problemática existente de la sociedad, pero lo denomina como algo naturalizado y anticipado al ser humano. Siguiendo este modelo nos encontramos con que la realidad se encuentra estructurada teniendo cada participante de la comunidad un rol específico (los cuales contribuyen al buen funcionamiento de la misma). La cultura en este caso se concibe como la adquisición de conocimientos que se transmiten de generación en generación, dichos saberes se considerarían objetivos, con un análisis de problemática basado en la causa-efecto. En cuanto a la participación, es entendida de forma integradora y estaría estrechamente relacionada con el sistema o modelo actual de la sociedad, sin necesidad de cuestionarse aspectos sobre ella.
- Modelo Interpretativo: este modelo considera que la realidad social se forma a través de pautas de comportamientos que le dan un sentido particular, al mismo tiempo que pluralista y variable. En este sentido, los contextos adquieren un significado en el tiempo en el que se desarrolla la vida de las personas. Dentro de dicho paradigma se considera al ser humano relacional, es decir, con la capacidad de relacionarse socialmente con otros iguales. El papel de la Animación sociocultural en este sentido es intervenir positivamente en promover procesos de socialización mediante acciones en las que se transmitan la cultura, perfeccionándose los pensamientos de cada persona de forma que se permita que el colectivo se desenvuelva de la mejor forma dentro de la sociedad actual. Generalmente estas acciones se relacionan con el voluntariado o la formación comunicativa.
- Modelo dialéctico: este paradigma se basa en los cambios necesarios procedentes de una transformación, surgidos a partir de la demanda de querer formar una sociedad mejor. Desde este paradigma se trata de construir procesos de intervención social, donde la ASC se caracterizaría por promover la participación de los componentes de una sociedad comprometidos en el desarrollo de sus propios procesos socioculturales.