Tipos de organizaciones de voluntariado
Existen distintos criterios de clasificación para determinar los tipos de organizaciones de voluntariado que hay, pero aquí nos interesa conocer la tipología en función de los modelos de participación o espacios de voluntariado, distinguiendo las siguientes:
Organizaciones de voluntariado:
Son aquellas organizaciones que están compuestas mayoritariamente por personas voluntarias, sin perjuicio de poder contar con personal contratado para desarrollar ciertas actividades. Estas organizaciones llevan a cabo acciones dirigidas a terceros y se mueven en distintos ámbitos de actuación.
Por ejemplo, una organización dirigida a la protección del medio ambiente que estuviera compuesta en su totalidad por personal voluntario. Claramente las actividades están orientadas a terceros y a lograr beneficios comunes.
Organizaciones con voluntariado:
Se trata de organizaciones formadas por personas voluntarias pero además por usuarios/as, familiares, socios/as y/o personal contratado. Estas organizaciones, normalmente, representan y se dirigen a colectivos y realidades concretas, desarrollando actividades asistenciales, de apoyo o denuncia. Suelen contar con la participación de personas voluntarias para la realización de sus actividades.
El ejemplo típico sería una organización de apoyo a personas enfermas y sus familiares. Normalmente este tipo de organizaciones se componen por las personas socias, familiares, personal voluntario y, en su caso, personal contratado. Asimismo, las actividades suelen estar dirigidas a sus socios/as y hacia la población en general como denuncia y sensibilización.
Organizaciones para voluntariado:
Aquí se pueden incluir aquellas organizaciones que no cuentan propiamente con personal voluntario, pero que tienen ciertos acuerdos de colaboración con otras organizaciones DE o CON voluntariado para que desarrollen actividades concretas dentro de ellas.
Por ejemplo un hospital, residencia o centro penitenciario no cuentan con un cuerpo de voluntarios/as para realizar actividades. Sin embargo, pueden tener acuerdos de colaboración con organizaciones de apoyo a personas enfermas, de acompañamiento a personas mayores, o que trabajen por la inserción de las personas presas para realizar actividades concretas dentro de estos centros; y que suponen un apoyo a las actividades que normalmente se realizan por el personal remunerado de los mismos.