Los centavos premios al atropello lingüístico
Obtener el décimo primer puesto en cualquier evento no es un buen resultado, y menos aún el décimo segundo . No porque quedar undécimo y duodécimo sean unos puestos poco relevantes, sino porque los puestos décimo primero y décimo segundo simplemente no existen: La Real Academia Española no acepta el uso de esos términos, que se han creado en analogía con decimotercero y sucesivos. Es verdad que cuando llegamos a la veintena normalmente hablamos de "vigésimoprimero" (o "vigésimo primero") y "vigésimosegundo" (o "vigésimo segundo"), y tal es una de las razones por las que asimilamos que con los puestos 11 y 12 debemos hacer lo mismo, aunque cometamos un error debido a ello. Pero lo peor es emplear el determinante numeral partitivo al hablar de posiciones y puestos: "el onceavo lugar fue para". El partitivo designa lo que su nombre indica: una parte o porción de un total, por lo que no se debe nunca utilizar para hablar de lugares o puestos. Porque, imagínense: si ahora el puesto vigésimo es el puesto veinteavo, el puesto centésimo" ¿será el centavo?