Plan de estudio
El contenido del plan de estudio debe incluir toda una serie de habilidades o estrategias que necesita la persona para desarrollarse satisfactoriamente y disfrutar de una vida plena, es en esta fase donde al niño se le debe incluir habilidades de enseñanza que la mayoría de los niños no necesitan que le enseñen tales como jugar e imitar.
Todos los niños necesitan jugar. No solo porque lo pasan bien, sino porque es imprescindible para un buen desarrollo de su personalidad. Aprenden a conocerse y a conocer lo que les rodea. Aprenden a manejar su cuerpo y a usar materiales diversos para alcanzar unos objetivos.
Los niños sin problemas tienen capacidad para aprender a jugar por sí mismos, sin la ayuda de un adulto (aunque les conviene jugar mucho con sus padres); e incluso pueden jugar con poco material específico.
Sin embargo, los niños con necesidades especiales no suelen tener esa iniciativa propia y necesitan ser ayudados desde que nacen. Dadas sus condiciones físicas y psíquicas tienen dificultades para aprender a jugar.
El tiempo, esfuerzo y entusiasmo se verán compensados cuando se descubre que, poco a poco, van siendo capaces de desplegar actividades propias con iniciativa y creatividad.
Será necesario que el adulto guíe al niño y le enseñe y facilite el uso y disfrute del material que se le ofrece. Copiando tus gestos el pequeño va aprendiendo cómo expresar sus sentimientos, creando el primer vínculo con su entorno. La imitación es un proceso mental que permite el aprendizaje social y es responsable de la propagación de las conductas y de la cultura a partir de la observación de un modelo.
El plan de estudio está basado en ejercer un fuerte énfasis en el desarrollo del habla y en las habilidades conceptuales y académicas.
El plan de estudio o de trabajo debe ser desarrollado secuencialmente para que los conceptos y habilidades desarrolladas sean más fáciles, y de esta forma sean enseñadas primero; para que las actividades más complejas no sean introducidas hasta que el niño no aprenda las habilidades más sencillas. Sin embargo, no debe haber ninguna idea rígida preconcebida del orden en el que el niño debe aprender. Por ejemplo, aunque no es un patrón común, algunos niños puede que aprendan a leer antes de que puedan hablar.
Es muy importante constituir el éxito en el niño y expandir la utilización de habilidades existentes, así como darle el valor necesario para que desarrolle nuevas aptitudes o habilidades.
Para ello se realiza todo un proceso de estimulación en diversas áreas que estudiaremos en las siguientes lecciones.