Nutrición en personas mayores que realizan ejercicio
Los procesos de digestión, absorción, utilización y excreción de nutrientes se suelen ver afectados con el envejecimiento. Esto hace que las personas mayores deban desarrollar estrategias dietéticas, nutricionales y culinarias.
Ante todo hay que señalar que el aporte energético que debe recibir una persona mayor tiene que ir en concordancia con el ejercicio físico que realice, y debe ayudar a mantener el peso estable.
El aporte de proteínas adecuado normalmente será: un 60% de proteínas animales, carne a la plancha, pescado, huevos… y un 40% proteínas de origen vegetal para mejorar la digestión y completar la tasa de aminoácidos esenciales (legumbres, verduras, cereales).
Aproximadamente la mitad del aporte calórico diario de una persona mayor debe contener hidratos de carbono para cubrir las necesidades de minerales y vitaminas necesarios. Algunos alimentos de este tipo son el azúcar, el arroz, la pasta, la harina, los cereales, la miel, las galletas, dátiles, pasas, mermeladas, patatas, dulces, pan, judías blancas, etc. Se deben saber combinar de una manera moderada en la dieta.
2 o 3 raciones diarias de derivados lácteos y otras 2 o 3 de verduras y hortalizas (preferentemente al vapor, en puré o bien troceadas). También 2 o 3 piezas de frutas bien lavadas y sin piel.
- Las dietas deben ser sencillas y fáciles de preparar.
- Los alimentos preferentemente se presentarán de manera vistosa y agradable.
- Hacer 5 comidas diarias, siendo la última de carácter ligero.
- Los zumos y líquidos constituirán una sola toma. Se puede permitir un vasito de vino tinto si forma parte de la costumbre del anciano y no se da contraindicación médica. Por el contrario, se debe moderar el consumo de café y bebidas excitantes.
- La hora de la comida debe ser armoniosa y muchísimo mejor en buena compañía.
- Respetar los hábitos y gustos personales.
Todo esto se ha explicado a grandes rasgos, para mantener una perfecta sincronización entre el ejercicio realizado y la dieta se debe consultar con un especialista en nutrición.