Batalla de Verdún

La “Batalla de Verdún” pasa por ser uno de los enfrentamientos más sangrientos que se produjeron en el contexto de la I Guerra Mundial, además de ser el de mayor duración; una “guerra de trincheras” y de desgaste que comenzó con el ataque alemán sobre los franceses el 21 de febrero de 1916, con el lanzamiento de artillería sobre la ciudad durante 10 horas seguidas; finalizando el 16 de diciembre de ese mismo año.

Los alemanes consideraban que vencer en esta batalla les daría una ventaja fundamental para poder alcanzar París, su objetivo final; pero no contaron con la resistencia de las tropas francesas.

Pretendían por tanto los alemanes un enfrentamiento de “larga duración” para minar la moral de los franceses, y para causar cuantas más bajas mejor entre los enemigos, algo que facilitaría sobremanera la posterior victoria.

Comenzó “de cara” para los germanos, pues causaron gran número de bajas entre los franceses, llegando al mes de Junio con todo favorable para una victoria alemana, pero una serie de decisiones tácticas harán que los franceses recuperen posiciones y frenen el ímpetu alemán; de manera que poco a poco se irá revirtiendo la situación.

Finalmente, y después de tan largo período de conflicto, ninguno de los contendientes logrará una ventaja o avance reseñable con respecto al enemigo, quedando la situación casi como al comienzo del enfrentamiento en Verdún; salvo por una cuestión, el número de bajas que allí se produjeron, pues según la fuente consultada oscilará entre las 700.000 y casi el millón.