Dólmen
Los dólmenes son construcciones megalíticas realizadas durante el neolítico y que se encuentran principalmente en Europa Occidental.
Hay diferentes tipos, pero los más comunes son los que se componen de dos piedras en posición vertical y semienterradas en el suelo a modo de anclaje, sobre la que descansa otra piedra en forma horizontal.
Este tipo de dolmen recibe el nombre de dolmen simple; habiendo otros tipos como los de:
-Galería: La construcción forma una especie de cámara alargada.
-Corredor: Colocados en serie y en número superior a la unidad, formando como su propio nombre indica una especie de “corredor”.
Detalles importantes y a tener en cuenta son dos:
Por un lado la función para la que se realizaron, pues en un principio se creía que simplemente eran unas construcciones de tipo funerario, si bien con el paso del tiempo y los estudios alrededor de los mismos se concluyó que también se podían asociar con fenómenos astrales o cultos al sol o la luna, así como tener un uso de indicador de límites territoriales.
Por otro lado, hay que destacar el inmenso trabajo que significaba el construir algo como esto, pues se han identificado dólmenes cuyas piedras fueron extraídas de lugares a más de 30 kilómetros de donde se ubicarían finalmente, con todo lo que ello conlleva en cuanto a tiempo, esfuerzo y organización para transportar estas piedras de varias toneladas desde sus sitios de origen hasta su definitivo emplazamiento; siendo necesario evidentemente un gran número de personas implicadas en dicha tarea.