el origen de la expresión "dar palos de ciego"
La expresión “dar palos de ciego” se usa principalmente cuando queremos referirnos a que se está realizando o llevando a cabo algo sin saber muy bien cómo hacerlo; titubeando, dudando, y sin un rumbo fijo… con pocas probabilidades de éxito final.
Parece ser que el origen se encuentra en una modalidad del actual “Juego de la Piñata”, que se llevaba a cabo en la Edad Media.
Esta modalidad consistía en arrojar uno o varios cerdos a una plaza vallada o un lugar delimitado para que el animal no pudiera escapar, mientras un determinado número de personas ciegas provistas de un palo trataban de darle caza.
Ambos contendientes daban rabiosos e impetuosos golpes para intentar matarlo y llevárselo como recompensa… el problema venía cuando algunos de estos golpes se los propinaban entre ellos; algo que divertía mucho más a los asistentes a tan lamentable espectáculo.
En la actualidad el juego tiene como protagonista a una persona con los ojos vendados que tiene que golpear una vasija de barro (o un contenedor de papel) que está colgado a una altura variable y que contiene en su interior golosinas y otros productos similares.