el origen de la expresión "desternillarse de risa"
Cuando decimos que alguien se “desternilla (no destornilla) de risa” aludimos a que esa persona se ríe a carcajadas y parece que no puede parar de hacerlo.
Pues bien, se usa la palabra “desternillar” en alusión a las “ternillas”, unos cartílagos que se encuentran en diferentes partes del cuerpo humano (orejas, mandíbula...) y que debido al movimiento “espasmódico” y exagerado del que se desternilla parece que se van a romper, a “desternillar”.