Gastos y deducciones fiscales*
Existen dos conceptos fiscales que debemos añadir a nuestro vocabulario, los costes de establecimientos y los costes de capital.
Costes de establecimiento (Business Expenses)
Son los que se generan al iniciar una actividad comercial o negocio, por lo general se consideran deducibles de impuestos, si nuestra actividad tiene ánimo de lucro.
Por ejemplo, los costes de alquilar un local, viajes de negocios y el pago a los empleados son deducibles.
Costes de Capital (Capital Expenses)
Los gastos de capital se producen cuando compramos activos específicos, tales como bienes o equipos que por lo general tienen una vida útil de un año o más y gracias a su adquisición nuestra empresa es capaz de aumentar la calidad y cantidad de productos y servicios que ofrecer.
Por ejemplo, si es dueño de un negocio de jardinería y compra cortadoras y equipos de excavación, estos serán considerados costes de capital.
Para recuperar el dinero que invertimos podemos hacerlo a través de la depreciación, amortización o agotamiento.
Estos métodos de recuperación nos permiten deducir parte del costo cada año, y de esta manera recuperar costes de capital con el tiempo.
Averiguar si una compra es un gasto de establecimiento o un coste de capital no siempre es fácil.
Para saber más sobre este tema en concreto, el IRS nos facilita la labor, desde su página web, ofreciéndonos recursos formativos gratuitos.
Lo ideal en estos casos es acudir a nuestro contador público del que ya hemos hablado en anteriores capítulos**.
*http://www.irs.gov/businesses/small/article/0,,id=109807,00.html
**http://www.irs.gov/businesses/small/article/0,,id=97726,00.html
